La capacidad de asombro se define como la inocencia, la curiosidad y la habilidad de llegar a conclusiones más profundas de lo que usualmente se ve. Si los seres humanos no tuviesen la capacidad de razonar, no se desarrollaría con eficacia la habilidad y desarrollo de la misma.
La relevancia de las preguntas y la curiosidad en el desarrollo social ha establecido la comunicación entre individuos; como también el avance y evolución de la raza humana. Las primeras formas de expresión permitieron conocer lugares y formas de vida los cuales pueden o no llamar nuestra atención.
A pesar de que los seres humanos lleguemos al mundo con millones de referencias y aspectos creados, es primordial mantener la capacidad de asombro a lo largo de la vida; con el fin de transformar, cambiar e innovar el espacio que ocupamos y todo aquello que nos rodea.
Bibliografía
Hernández, R.; Fernández, C. & Bautista, P. (1997). Metodología de la investigación. México: Mc Graw Hill.
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